La ley del karma, la ley de la balanza cósmica nos una ley ciega: también sales puede solicitar crédito a los maestros del karma y esto es algo que muchos ignoran. Todo crédito hay que pagarlo con buenas obras.
Necesitamos hacernos conscientes de nuestro propio karma y eso solo es posible mediante " el estado de alerta novedad" Todo efecto de la vida, todo acontecimiento,tiene su causa en una vibra anterior pero necesita os hacernos conscientes de eso. Hacer conciencia del hecho bueno o algo que vivimos a través de una meditación en silencio.
El jefe de los sacerdote del tribunal del karma es el Gran Maestro Anubis.El supremo juez que esta asesorado en su trabajo por los 42 jueces de la ley.
El templo de Anubis, el Supremo regente del karma no se encuentra en este mundo tridimensional sino en la quinta dimensión ,en el llamado mundo astral. En ese tribunal reina el amor y la justicia. En el existe un libro del debe y del haber ,para cada hombre,en el que se anota minuciosamente. Diario sus buenas y malas obras.
Quien despierta conciencia puede viajar en sus cuerpos internos fuera del cuerpo físico, apelan voluntad consciente y estudiar en el templo de Anubis y sus 42 jueces, su propio libro del destino.
El derecho romano tiene como símbolos de la justicia la balanza y la espada, no es extraño que e el templo de Anubis se vea por todos lados balanzas y espadas.
En el tribunal también se encuentran abogados defensores. Pero todo se paga. , los créditos solicitados se pagan con trabajos desinteresados e inspirados en amor hacia los que sufren .
"La ignorancia de la Ley no excluye su cumplimiento", el peor pecado es la ignorancia.
Tenemos que hacer constantemente buenas obras para que tengamos con que pagar nuestras deudas de esta vida y de vidas pasadas.
Cuando ofician como jueces, los maestros del karma usan la máscara sagrada en forma de cabeza de chacal o lobo emplumado emblema de la verdad con ella se presentan a los iniciados en los mundos internos.
No sólo se paga el karma por el mal que se hace, sino por el bien que se deja de hacer pudiendo se hacer.
Samael Gnosis.
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