Decreto :
La victoriosa presencia del Todopoderoso Dios, que mantiene el fuego violeta del amor liberador ardiendo a través de todo mi ser, y me sella en una columna de ese fuego sagrado; transmutando toda esa creencia humana que haya en mi, a través, alrededor, o encontra de mi, le convierte en salud, en pureza, en bienestar y en armonía, ya en este mismo momento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario